Secciones

16.2.10

La diferencia entre miedo y respeto

Hoy ha sido un día largo y frustrante... ¿El motivo? Los titulares que hablaban del cierre de la exposición fotográfica Circus Christi, en la que se mostraba una interpretación de las escenas del Via Crucis con personajes como prostitutas, drogadictos y homosexuales. El cierre ha sido el resultado de la polémica que ha despertado la obra entre ciertos sectores de la sociedad granadina, sobre todo católicos, y la fuerte respuesta de algunos grupos a los que no ha parecido bien la interpretación visual de Fernando Bayona y que no han dudado en recurrir a la amenaza para terminar con lo que consideran una falta de respeto.
Sinceramente, estoy indignada. Aquéllos que claman respeto, ahora se congratulan de que la exposición haya sido clausurada debido a que la Universidad de Granada (institución que acogía la muestra) no se encuentra en condiciones de asegurar la integridad ni de la obra ni del autor (que ha tenido que acudir a la policía ante las amenazas). Bien, a todos los que consideran que han ganado una batalla con el cierre de esta muestra, les diría que la clausura no ha sido fruto del respeto, sino del miedo, aunque no sé si esto significa algo para ellos.
Durante todo este largo día he estado leyendo comentarios de "ciudadanos" que apoyan esta medida en los que se invitaba al autor a atreverse a hacer lo mismo con otro tipo de cultos, como el Islam, a ver si no le ponían una bomba. ¿Qué significa eso? ¿Que los católicos que han escrito al mail del fotógrafo aconsejándole que mirara a ambos lados de la calle porque su vida corre peligro (y digo corre) son buenos ya que no le ofrecen bombas? ¿Que hay que hacer como los musulmanes (o islamistas radicales, aunque haya mucha gente que no conozca la diferencia) ésos a los que por lo general se trata de "poco civilizados"? ¿No era que en nuestro país no teníamos esos problemas de integrismo religioso? ¿No era que eso son cosas de "moros" y de países no democráticos? ¿No era que la libertad de expresión es un derecho constitucional?
Pero, claro, es que se trata de una obra que hiere muchas sensibilidades. Claro. De sensibilidades heridas creo que podemos hablar todos. De crucifijos en los colegios, por ejemplo... ah, no, que eso no se podía quitar porque es un símbolo cultural, es verdad. Igual que las procesiones que colapsan la ciudad de Granada en Semana Santa y que las personas que viven en el Realejo (barrio donde estaba situada la exposición de la discordia), por ejemplo, tienen que tragar sean o no creyentes. Y yo, que respeto, acepto que son símbolos culturales, de esa cultura en la que nos hemos criado los nacidos en este país profesemos el credo que profesemos. Entonces, ¿por qué cuando se usan, como símbolos culturales, para crear una serie de imágenes se convierten en símbolos religiosos que pertenecen sólo a los creyentes? ¿En qué quedamos?
El fotógrafo ha recurrido a la iconografía católica, probablemente, porque es la que conoce mejor, porque es la que ha mamado. Igual que artistas de otras religiones y culturas han transgredido dentro de sus sociedades, utilizando elementos religiosos de una manera que no ha gustado a todo el mundo, aunque a algunos les cueste creerlo. Si no que se lo digan al cantante senegalés Youssou N'Dour que vio como la crítica se le echaba encima y su público, compuesto por millones de personas, le daba la espalda tras la publicación de su album Egypt en el que mezclaba cánticos religiosos sufies con melodías y ritmos pop que fue, para mayor disgusto de los puristas islámicos, presentado en Ramadán. Siendo él una persona profundamente religiosa. Y siguió adelante con su proyecto, sin tener que temer por su vida.



Desde mi punto de vista, el contenidos de las imágenes es provocador, como provocadoras han sido numerosas obras de arte, y entiendo que ciertas personas se hayan sentido heridas. Entendí ayer las cartas contrarias a la exposición que se publicaron en la prensa aunque no las compartiera. Entendería que se hubieran puesto con contacto con el autor para hacerle llegar su malestar por la muestra, incluso que hubieran movilizado a otros detractores para promover que no fueran a ver la exposición y otras medidas que mostrasen su desacuerdo. Pero jamás podré estar de acuerdo con que amenacen, censuren y se vanaglorien por ello.

*Dejo dos playlist con discos que levantaron ampollas entre religiosos:

  • Jesucristo Superstar, en su versión española, con las voces de Camilo Sesto y, curioso, Teddy Bautista en el papel de Judas.

  • Egypt, de Youssou N'Dour, el disco que he mencionado en el post. Si queréis conocer mejor la historia de este hombre y, en concreto, de este album, recomiendo el documental "I bring what I love" (el del trailer).

13 comments:

Anonymous said...

No podrías haberlo dicho más claro. Ni mejor.

Perla Hachuel said...

Impresionante artículo. Claro, directo, con conocimiento...
Cuando has hablado de la música he recordado los remix megamix de cánticos gregorianos que bailaba medio mundo. Cánticos religiosos dirigidos a Dios "degradados" a música comercial que se bailaba en sitios en los que probablemente no se estaba rezando el rosario... eso si, por qué?
Este tema es apasionante!

Mario Ortega said...

He conocido este post por recomendación de Perla en facebook.
Te felicito.

Francisco Luis Benítez Martínez said...

Genial post, Ámina, lo comparto al 100%. Directo y al tema central de la realidad: la tolerancia sólo es aplicable unidireccionalmente y sólo cuando me conviene. Pero claro eso es lo que tiene tener detrás un marketing bimilenario y los voceros propederastras que visten de negro. Siempre me viene a colación esa viejo adagio marxista: "La religión es el opio del pueblo", y que droga por "dios"; capaz de matar por un intangible.
Por lo menos nos queda el derecho al pataleo...

José Antonio Peñas said...

No hay incoherencia en la postura de los creyentes: la iglesia jamás se ha apoyado en el respeto, sólo en el miedo. Miedo a las armas (en esos tiempos felices en que el cristianismo se expandía a fuerza de espada y arcabuz), miedo a la hoguera, miedo al infierno, miedo a los anatemas, miedo al desprestigio social, miedo al hambre y al látigo (en todos esos lugares donde los misioneros fueron la avanzadilla de la colonización), miedo a la policía (como en España en esos felices 40 años que tanto echa de moenos la conferencia episcopal…), ese es el camino de las sotanas: infundir miedo.

layla said...

Enhorabuena Amina, por expresar tan bien lo que a muchos se nos ha pasado por la cabeza al conocer esta noticia.

PEPA said...

Efectivamente Amina, tal cual lo has contado. Pero hay algo que me "ha gustado" de lo ocurrido, y es lo significativo de la poca o ninguna contención explicitada por parte de esos "creyentes" que se han considerado tocados por la mano de su dios (que, por cierto, debe gastar muy mala ostia), cual cruzados en la edad media cortando cabezas de infieles. Está bien que se posicionen en lo más radical, sin duda alguna han conseguido, ellos solitos, que la cara de asombro que se nos ha quedado a muchos termine con una frase entre el aburrimiento y el tedio que podría resumirse con un "bufff....ya están otra vez éstos!!!". (una infiel)

Unknown said...

Estoy de acuerdo contigo en todo, también en que la muestra no me ha gustado... Espero que en nuestro democrático y tolerante país alguien comience la tendencia de pensar objetivamente, comparar y, sobre todo, ponerse en el lugar de los demás a la hora de quejarse, amenazar y atacar irresponsablemente.
Bravo.

Unknown said...

No puedo estar más de acuerdo con este post.
Sobre Circus Christi, os comento que se ha creado un grupo en Facebook para aglutinar a todos aquellos que nos hemos sentido indignados por la clausura de la exposición.
Os dejo el enlace y os invito a sumaros, si queréis.
Un saludo

http://www.facebook.com/profile.php?id=1309765350#!/group.php?gid=312857121005

Ámina said...

Gracias por el enlace, Mar... ¿Habrá que darle difusión, no?

Anonymous said...

Algunos comentarios:
- Dices: "algunos grupos a los que no ha parecido bien [...] y que no han dudado en recurrir a la amenaza"
Concretamente ¿a qué grupos te refieres? ¿Podrías indicar el nombre de algún grupo que haya amenazado al autor? Hasta donde puedo imaginar, las amenazas habrán llegado de unos cuantos descerebrados.

Dices: "he estado leyendo comentarios de "ciudadanos" que [...] nvitaba al autor a atreverse a hacer lo mismo con otro tipo de cultos, como el Islam. [...]"

Te preguntas "¿Qué significa eso?". Supongo que la respuesta sería que de haberlo hecho así, no habría recibido amenazas de 4 idiotas, directamente lo habrían matado. No creo, y tú tampoco, que haya una proporción mínima de católicos que hubiera aprobado el ajusticiamiento del autor. En un contexto islámico, la proporción habría sido justamente la inversa. Pon un 99%. La diferencia, como ves, es sustancial, y evidentemente el autor es consciente de ello.

Dices: "De sensibilidades heridas creo que podemos hablar todos. De crucifijos en los colegios...". Sinceramente, si un crucifijo te ofende, ¿te ofende? Entonces entenderás que para un católico una muestra fotográfica con ese planteamiento también es ofensiva.

Respecto a las manifestaciones religiosas, déjame que te recuerde algo. España es un país de una tradición judeo-cristiana que se remonta a casi 2.000 años. Es parte de nuestra cultura, como el idioma o el flamenco. A mí no me gusta el flamenco, pero entiendo que con mi dinero Canal Sur produzca programas dedicados al flamenco. No los veo, pero vivo en Andalucía y me aguanto, y lo comprendo.

Off-topic: Personalmente a mí no me gusta la Semana Santa, es un espectáculo y no una manifestación religiosa, al menos en Andalucía. Sería difícil reunir a un puñado de cofrades verdaderamente comprometidos con la Iglesia.

Dices: "El fotógrafo ha recurrido a la iconografía católica, probablemente, porque es la que conoce mejor, porque es la que ha mamado". Hombre, como disculpa está un poco justita.

Dices: "...el contenidos de las imágenes es provocador [...] entiendo que ciertas personas se hayan sentido heridas [...] Pero jamás podré estar de acuerdo con que amenacen". Creo que esto lo podrían suscribir la mayoría de los católicos.

En mi opinión, sin embargo, creo que "provocador" es corto. Provocador habría sido comparar el nacimiento en un pesebre (un establo, vamos) con un poblado chavolista, y ya puestos, infectado de droga. Pero habría sido admisible, ya que la equivalencia sería acertada. Provocador habría sido sugerir que los que rodeaban a Jesús eran drogadictos, lo cual no diferiría mucho de aquéllos a los que Él se acercaba. Hasta, y esto es una opinión personal, sería admisible plantear que tuviera SIDA, para representar desde una perspectiva actual el rechazo que sufrió Jesús en su época.

Ahora bien, añadir que María era puta, que José era maricón y que el propio Jesús se folló a María Magdalena para luego hacerse gay, no es provocar, es un insulto en toda regla.

Comparar Jesucristo Superstar con las fotos de Bayona es demasiado atrevido. No creo que haya punto de comparación. Cuando se estrenó la obra en España en 1975 ¡1975! desde luego no generó un rechazo tan contundente como el que ha ocurrido con la exposición de Bayona. Puedes ver reseñas en http://www.joseantoniocarrasco.es/musicas/jesucristosuperstar/index.php

Ámina said...

Veamos, por partes:

A pesar de tus críticas, creo que, en lo sustancial, estamos de acuerdo: recurrir a la amenaza no es opción. Y como digo, tanto en el primer párrafo, como en el segundo, ése ha sido el motivo por el que se ha cerrado la exposición y eso es lo que no se puede tolerar.

Cuando digo que algunos grupos no han dudado a recurrir a la amenaza me refiero por ejemplo a Skin Head Granada, que firmaban uno de los mails del autor. Por supuesto sé que no todos los grupos que se han mostrado contrarios a la exposición o que se han quejado han recurrido a la amenaza, pero otros sí. Además de que, una vez clausurada la muestra, muchos han sido los ciudadanos descontentos con la obra que, a pesar de no haber firmado las amenazas ni recurrido a ellas, se han congratulado de que la exposición se haya cerrado sin condenar las amenazas, sin importarles lo que se escondía tras el cierre. Dices que la mayoría de los católicos suscribirían que no se debe recurrir a la amenaza para terminar con una situación como ésta, pero la verdad es que eso no se ha notado en los comentarios que circulan por la red, quizás porque los católicos de los que hablan han preferido callar...

En cuanto a la comparación con el islam... bueno, lo que pretendo decir es que es una comparación absurda y estéril. Absurda porque decir que eso no se ha atrevido a hacerlo con el islam por miedo y que se atreve con los católicos porque no dan tanto miedo no es apelar al respeto en ningún momento, sino, y perdona por reiterarme, al miedo, con lo cual es un argumento que no aporta nada, es decir, estéril. Y cuando pregunto ¿qué significa eso? Lo que quiero decir es que si ese argumento esconde algún tipo de admiración por la capacidad coercitiva de los “musulmanes” (me gustaría que alguien tuviera el detalle de diferenciar entre musulmanes e “islamistas radicales”), porque, por lo general, la actitudes de los islamistas radicales son criticadas y tachadas de fundamentalistas.
Por otra parte, con respecto a este tema, por ejemplo, dices que no crees que una proporción mínima de católicos hubiera apoyado el ajusticiamiento. Sinceramente, a mí, viendo algunos comentarios, me ha dado mucho miedo saber donde vivo, así que no puedo estar tan segura de tu afirmación. En cuanto a que en un país musulmán, el 99% de la población estaría de acuerdo, es mucho decir, que países musulmanes hay muchos, con realidades muy distintas y con maneras de entender y vivir la religión muy distintas, y no todos son talibanes, de hecho, la facilidad con la que se equipara musulman a fundamentalista o terrorista en nuestro entorno es pasmosa y, ya que hablamos de sensibilidades, una ofensa para los miles de musulmanes que viven en nuestro país (que los hay por más que tengamos 2000 años de tradición judeocrisitiana).

Ámina said...

Los crucifijos no me ofenden, me son indiferentes. Pero entiendo que no tienen por qué estar en un espacio de educación público al que acuden alumnos de todas las confesiones, también aconfesionales, porque ellos no tienen la opción de no ir a ese espacio (es educación obligatoria), sin embargo, la exposición no era de visita obligatoria. Lo he usado como ejmeplo porque es un caso más o menos reciente donde se defendió la permanencia argumentando que eran símbolos culturales y no sólo religiosos, para crear paralelismos.

Respecto a las manifestaciones religiosas, como parte de nuestra cultura, como bien dices ahí están, nos gusten o no. Hablas del flamenco y de cómo también forma parte de la cultura. Bien, ya que haces la comparación, voy a tomarte el testigo. El flamenco es parte de nuestra cultura y yo, que he nacido aquí, me guste o no, lo he escuchado por la calle, en los bares, en la casa de mi vecina, en la feria... así que lo he asimilado. Ahora, imaginemos que soy música y, a la hora de componer, a pesar de que nunca me ha llamado la atención el flamenco, me apetece usar el compás de la bulería como base para una canción, qué se yo, tecno... Pues así es como entiendo yo la obra de Bayona. Porque, si las manifestaciones religiosas forman parte de la cultura en la que vivo también son mías de alguna manera y, si no soy religiosa, creo que tengo derecho a disfrutarlas de otra formas: como espectáculo, como obras de arte, como literatura, etc.

Y aquí entramos en la siguiente cuestión: el auto ha usado unos símbolos culturales que forman parte del imaginario colectivo de la sociedad en la que ha crecido (además de ser símbolos religiosos). No es una disculpa, es una explicación de la obra desde mi punto de vista.

Dices que provocador sería comparar el nacimiento en un pesebre con un poblado de chabolas y otros conceptos, pero, para mí, el error es entender la obra como una comparación. Que Bayona haya puesto a una prostituta en el lugar de María, no siginifica que esté comparando a la Virgen con una puta. Tal y como yo lo veo, Bayona ha utilizado una serie de escenas de la Biblia y sus personajes para crear la galería fotográfica que ha querido, sin que ello signifique que esté hablando de religión.

Por último, Jesucristo Superstar, a pesar de que en su estreno en España en 1975 (¡1975! ¿No estaremos yendo hacia atrás?), no armó tanto revuelo sí que lo armó en su estreno en EEUU en el año 1971 por parte de algunos grupos católicos. Además, lo he usado porque quería acompañar el texto de algún elemento musical (algo que suelo hacer con todos mis post) y no tengo un catálogo completo de obras para colgar, limitaciones técnicas y de temas de derechos de autor, ya sabes. Pero hay muchos ejemplos de obras que usan pasajes de la Biblia para contar historias que nada tienen que ver con el cristianismo, y de otras religiones también.